El Día Mundial de la Visión (WSD) se celebra la segunda semana de octubre con motivo de promover la salud visual.

Organizaciones vinculadas la salud visual, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Agencia Internacional para la Prevención de la Ceguera, inciden en la importancia de la prevención, que, según esta última agencia, puede reducir sustancialmente esta problemática antes de finalizar el próximo lustro.

Por su parte, las OMS quiere concienciar sobre la universalidad del problema y la necesidad de las prácticas preventivas, pues afirma que “hasta el 80% de los casos de ceguera son evitables, bien porque son resultado de afecciones prevenibles (20%) bien porque pueden tratarse (60%) hasta el punto de recuperar la visión. La prevención y el tratamiento de la pérdida de la visión se cuentan entre las intervenciones de salud más eficientes y que dan mejores resultados”.

La detección precoz de las enfermedades en la visión es clave fundamental, para lo cual hay que realizar revisiones oftalmológicas periódicas con especialistas médicos, especialmente en caso de padecer hipertensión, diabetes o algún trastorno cardiovascular.

La prevención comienza en la alimentación

La salud ocular está vinculada a la alimentación, y las dietas desequilibradas pueden afectar tanto a los propios ojos como a los vasos sanguíneos y los músculos que los rodean.

Según José Antonio Parejo, oftalmólogo y director de IMQ Visión, “El hecho de llevar una dieta adecuada puede mejorar la visión hasta en un 30 %. Los alimentos más aconsejables son los que contienen vitaminas A, E, C, B2 (riboflavina) y luteína.”

Diversos estudios sugieren que el consumo regular de antioxidantes tales como vitamina C , vitamina E y carotenoides (betacaroteno, luteína y licopeno) están asociados con una incidencia menor de algunas enfermedades oculares, como las cataratas[1].

“Hay evidencias de alta calidad para apoyar el uso de alimentos que contengan antioxidantes (β-caroteno, vitamina C y vitamina E) y zinc para frenar la progresión en los de riesgo moderado a alto de desarrollar Degeneración macular asociada con la edad”, afirman Chiu CJ [2]y Taylor A. En su estudio “Nutritional antioxidants and age-related cataract and maculopathy”.

Por su parte, Schmidl[3] D, Garhöfer G, Schmetterer L, explican en su estudio “Nutritional supplements in age-related macular degeneration” que “hay evidencia en varios estudios de que la ingesta oral de alimentos ricos en micronutrientes es beneficiosa en la prevención de la progresión de la Degeneración macular asociada con la edad”.

Además de llevar a cabo revisiones con oftalmólogos y una dieta adecuada, conviene evitar factores de riesgo, como las radiaciones solares y el humo. Así mismo, en palabras del Dr. Parejo, “resulta perjudicial mantener la vista sobre un mismo punto, como la pantalla del ordenador o el televisor, durante mucho tiempo, o trabajar con mala iluminación”.

Según la OMS, “en el mundo hay unas 284 millones de personas con discapacidad visual: 39 millones son ciegas y 245 tienen baja visión. La miopía, hipermetropía y astigmatismo son causa principal de baja visión y en los países subdesarrollados, los mayores problemas los generan las cataratas y el tracoma. En los desarrollados son las enfermedades oculares crónicas, como la retinopatía diabética, el glaucoma y la degeneración macular asociada a la edad.”

Hojas de Moringa oleífera, ricas en antioxidantes, como vitaminas A, E, C, B2 (riboflavina) y luteína.

Hojas de Moringa oleifera, ricas en antioxidantes, como vitaminas A, E, C, B2 (riboflavina) y luteína.

  • Tavani A, Negri E, La Vecchia C. Food and nutrient intake and risk of cataract. Ann Epidemiol . 1996;6:41 – 46.
  • Carson C, Lee S, De Paola C, et al. Antioxidant intake and cataract in the Melbourne Visual Impairment Project [abstract]. Am J Epidemiol . 1994;139(11 suppl):A65.
  • Robertson JM, Donner AP, Trevithick JR. Vitamin E intake and risk of cataracts in humans. Ann N Y Acad Sci . 1989;570:372 – 382.
  • Rouhiainen P, Rouhiainen H, Salonen JT. Association between low plasma vitamin E concentration and progression of early cortical lens opacities. Am J Epidemiol . 1996;144:496 – 500.
  • Vitale S, West S, Hallfrish J, et al. Plasma antioxidants and risk of cortical and nuclear cataract. Epidemiology . 1993;4:195 – 203.
  • Vitale S, West S, Hallfrisch J, et al. Plasma vitamin C, E, and beta-carotene levels and risk of cataract. Invest Ophthalmol Vis Sci . 1991;32:723.
  • Ross WM, Creighton MO, Trevithick JR. Radiation cataractogenesis induced by neutron or gamma irradiation in the rat lens is reduced by vitamin E. Scanning Microsc . 1990;4:641 – 650.
  • Mares-Perlman JA, Brady WE, Klein BEK, et al. Diet and nuclear lens opacities. Am J Epidemiol . 1995;141:322 – 334.
  • Brown L, Rimm EB, Seddon JM, et al. A prospective study of carotenoid intake and risk of cataract extraction in US men. Am J Clin Nutr. 1999;70:517 – 521.
  • Chasan-Taber L, Willett WC, Weddon JM, et al. A prospective study of carotenoid and vitamin A intakes and risk of cataract extraction in US women. Am J Clin Nutr. 1999;70:509 – 516.

[1] Hankinson SE, Stampfer MJ, Seddon JM, et al. Nutrient intake and cataract extraction in women: a prospective study. BMJ . 1992;305:335 – 339.

[2] The Laboratory for Nutrition and Vision Research, USDA Human Nutrition Research Center on Aging, Tufts University, 711 Washington Street, Boston, MA 02111, USA.

[3] Department of Clinical Pharmacology, Medical University of Vienna, Vienna, Austria.